Zinemaldia 2012: 7 cajas

NUEVOS DIRECTORES

Nuevo cine paraguayo.

ACTUALIZADO: Premio del jurado Joven


Paraguay es un país con una cinematografía paupérrima: en toda su historia tendrán no más de una veintena de películas. Desde aquel país llega 7 cajas, trepidante y divertida película dirigida por Juan Carlos Maneglia y Tana Schémbori, que en 2011 obtuvo en el Zinemaldia el premio Cine en Construcción, es decir, la película en 2011 estaba incompleta, presentaron lo que tenían, y al ganar este premio, han podido financiar la película completa, ya que ese es el objetivo de este premio.

Víctor es un recadero en uno de los mercados de su ciudad. Se gana unas perrillas con ello, yendo de acá para allá, hasta que le encargan una mision importantísima: trasladar siete cajas a un punto que le comunicarán, y debe hacerlo con riesgo de su vida. Pronto se descubrirá qué mercancía contienen esas cajas y porqué son tan deseadas por el resto de personajes (a cada cual más peculiar): el jefe, el esbirro, el encargado de encontrar a Víctor, la hermana de éste y el chico que le gusta, y una amiga de Víctor, que se convertirá en su inseparable gran aliada.


Con un estilo copiado sin pudor de las películas de Tarantino, Guy Ritchie e incluso de Danny Boyle, la película tiene unas ideas en cuanto a realización y puesta en escena bastante buenas, espectaculares, dinámicas y atrayentes, especialmente para el público joven, aunque según lo visto en los pases del Zinemaldia, la película gusta por igual a la gente joven y a la gente más mayor

Los dos protagonistas, Víctor y su amiga, son una suerte de Don Quijote y Sancho Panza (si Don Quijote prometió una ínsula a su escudero, Víctor promete un teléfono móvil a su compañera... todos ansían tener un móvil de última generación) que vivirán un montón de aventuras para proteger las cajas, pero sobre todo sus propias vidas.Exceptuando a estos dos personajes, el resto son todo puras caricaturas, personajes rocambolescos, muy de cómic que en muchas ocasiones tienen absurdos diálogos, acordes con la personalidad de cada uno de ellos. Como decía: puro Tarantino.

Y es que ya lo reconocen los dos directores: han querido hacer una película que de alguna manera homenajea las películas hollywoodienses que llevan toda la vida viendo. Y ciertamente, no les ha quedado nada mal. Ojalá poco a poco la cinematografía paraguaya vaya despertando y nos ofrezca más películas, ya que parece que la cosa promete.

PD: Los diálogos son en guaraní, idioma oficial de Paraguay, muy parecido al castellano pero en muchas ocasiones ininteligible, con lo que para poder verla y entenderla bien, harán falta subtítulos en castellano.






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